¿Por qué nos cuesta sostener las metas (aunque tengamos todo para lograrlo)?

5 jun
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Te doy la bienvenida a este espacio de reflexión y acción. Una idea, una palabra, un pensamiento, un nuevo entendimiento o una perspectiva te llevarán a hacer algo diferente (#HAD).

Esta semana la pregunta es, cómo, si tenemos todo para lograr lo que nos proponemos, nuestros esfuerzos en algún punto del recorrido se pierden.

Hay algo frustrante, e incluso incómodo y estresante, en querer alcanzar metas importantes, solo para ver cómo se desvanecen con el tiempo. Como si sostener los resultados fuera más difícil que lograrlos.

¿Te ha pasado?

Te comprometes con un cambio, inicias con fuerza, los primeros pasos se sienten bien. Pero semanas después te ves repitiendo antiguos patrones, apagando incendios, sin espacio para respirar.

Seguramente te has preguntado: ¿qué me pasa? ¿Por qué si tanto lo quiero, no lo puedo sostener?

La respuesta no está en tu falta de capacidad, está en los obstáculos invisibles que afectan incluso a los líderes más exitosos. Así que déjame hacerlos visibles para que, con esa perspectiva, puedas Hacer Algo Diferente.

Obstáculo # 1. Hacer y lograr desde la exigencia, no desde la energía

No sé tú, pero yo he aprendido a funcionar presionada, forzándome, controlando. Un esfuerzo así se volvió terreno conocido; me pareció por años, una forma normal de operar, tan instalada, que ya era parte de mi zona de confort.

Con el tiempo aprendí los costos que cada una de esas acciones tenía en mi energía y bienestar. Probablemente, sabes de qué hablo.

Cuando el rendimiento se construye sobre el estrés, la exigencia, la presión y el desgaste, aparece el agotamiento, el cuerpo y la mente dicen hasta aquí.

Esto nos lleva a la conclusión, de que el cambio sostenible nace desde la energía, no desde la presión.

Obstáculo # 2. Desconectarse del para qué

Cuando el foco está solo en una meta externa (más ingresos, más resultados), puedes olvidar lo más importante: ¿para qué haces lo que haces?

Cuando el propósito se diluye, la motivación también. Y aunque llegue, hay una sensación de despropósito.

Conclusión, cada mañana cuestiona el para qué haces lo que haces y eso te dará una agenda basada en prioridades.

Obstáculo #3. Intentar hacerlo solo

A muchos ejecutivos les cuesta pedir ayuda. El liderazgo en soledad es una trampa silenciosa: no puedes compartir dudas, ni fracasos, ni agotamiento, ni preocupaciones, ni tampoco recibir ideas, perspectivas, ni soporte.

Conclusión, el crecimiento verdadero necesita comunidad, conversación, contención, soporte.

Obstáculo # 4. No actualizar nuestro sistema operativo

Bien decía Einstein, no puedes pretender, que, haciendo lo mismo, logres resultados diferentes. Pareciera que a veces esperamos nuevos resultados con viejos hábitos. Sí, cambias la meta, pero no la forma de trabajar, priorizar o pensar, sin darte cuenta, saboteas tu avance.

Conclusión, sostener el logro implica rediseñar tu forma de operar, tu marco mental, tus rutinas y acciones.

Obstáculo #5. Reaccionar en lugar de diseñar

Tu agenda seguramente está secuestrada por urgencias, interrupciones, prioridades y expectativas ajenas. Probablemente, pasas el día respondiendo… y te cuesta avanzar en lo que realmente importa.

Conclusión, sostener metas requiere de crear el espacio para que suceda.

Obstáculo #6. No integrar bienestar en tu orientación a incrementar tu desempeño y resultados

Aún hay líderes que creen que cuidarse es opcional, que el bienestar viene después o que es un lujo. La verdad es la opuesta: sin bienestar, no hay liderazgo ni resultados sostenibles.

Conclusión, tu día tiene que estar diseñado con micro descansos para reponer y recargar tu energía.