Tu poder no se fue, solo está cubierto de interferencias
- 10 jul
- 2 Min. de lectura
Te doy la bienvenida a este espacio de reflexión y acción. Una idea, una palabra, un pensamiento, un nuevo entendimiento o una perspectiva te llevarán a hacer algo diferente (#HAD).
Estaba con un cliente en una sesión de Coaching, cuando, durante la sesión me comentó que se estaba lamentando de los resultados que su oficina estaba teniendo, ya que se debía al equipo; esta persona consideraba que su equipo no era tan bueno como se lo habían descrito antes de ofrecerle la promoción.
Cuando terminó de quejarse; le pregunté si su equipo pasado de trabajo era bueno y su respuesta fue que, de hecho, era excelente; así que siguió mi interrogatorio.
Cuando le comenté que había tenido suerte por su buen equipo de trabajo, esta persona me respondió; claro que no tuve suerte, yo lo fui formando… Ahí, apareció la magia de la reflexión.
Mi cliente, un alto directivo de uno de los bancos más importantes a nivel global, se cubrió la cara y dijo: que pena Hilda, yo quejándome y el que tiene que hacer el trabajo de crecer al equipo soy yo.
La reflexión nos llevó a la conclusión de que mi cliente había perdido su convicción y poder personal, esos recursos que uno tiene para responder a los desafíos que se le presentan.
Cuando le pregunté, ¿cómo es ser tú, en tu mejor versión? El cambio de energía, convicción y fuerza personal volvieron y recuperando su poder, creó un plan para crecer capacidades de la gente y lograr los resultados que estaba acostumbrado a entregar.
Hoy, si pudieras ver la pantalla de su computadora, encontrarás un post-it que dice:
Kit de recursos personales: para usarlos cuando los necesites, sin olvidar que las respuestas están en ti.
Hay momentos en te desconectas de ti. Sabes que eres capaz, que tienes visión, que puedes tomar decisiones difíciles, pero te cuestionas más, te exiges el doble, te olvidas de ti para cumplir con todo, tu estrés sube y baja, tu respuesta clara y tu capacidad de decidir, ante los retos que tienes.
Eso no significa que hayas perdido tu poder.
Significa que estás operando rodeado de interferencias, ¿cuáles? Mira a continuación, cuáles te hacen sentido:
Autoexigencia excesiva
Miedo a decepcionar
Hábito de resolver todo tú
Creencias invisibles que te achican
Dudas respecto a tu capacidad de respuesta frente a la incertidumbre
Fatiga mental, lo que te tiene con baja claridad, bajas posibilidades
Y sí, eso agota. Te aleja de tu capacidad de decidir con claridad, de priorizar con intención, de actuar desde tu centro.
Pero aquí va la verdad que importa:
Tu poder sigue ahí. Solo necesita que hagas espacio para recuperarlo.
A veces el paso más valiente no es avanzar más rápido… Es quitar lo que ya no necesitas cargar. ¿Te acuerdas el post respecto a las microdecisiones que podrías tomar para transformar tu vida?, pues una de ellas, es decidir que NO vas a hacer hoy.
Porque liderar sin interferencias no significa hacer menos. Significa avanzar más libre, más enfocado y con más energía.
👉 ¿Qué estás dispuesto a soltar para recobrar tu poder personal?
Este es el trabajo real: claridad interna primero, liderazgo potente después.
Te veo en la siguiente reflexión.






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